Vea los Grandes Tumultos Dentro de Ella

Reverendo W. Reid Hankins, M. Div.
Traducido por Diácono Diego Merino.
Amós 3:9-15
10/15/17

«Vea los Grandes Tumultos Dentro de Ella».

¿Qué ve el mundo hoy cuando miran a la iglesia? Esa es una pregunta para reflexionar. ¿Mira el mundo en la iglesia de hoy lo que desean ver? ¿Que el Señor desearía que vean ellos? Es una pregunta a tener en cuenta así como estudiamos el pasaje de hoy. Verás, en ese tiempo para Israel, el mundo no hubiera visto de buena forma si miraban a Israel. Es cómo Amós comienza este pasaje. Pone a la gente a reflexionar sobre lo que vería el mundo si los vieran. Lamentablemente, el mundo vería mucho pecado en Israel, sobre todo un montón de pecados contra su propia gente.

Entonces, vamos a profundizar en este pasaje y empezar por ver la llamada de los testigos y sus testimonios. Esto nos recuerda que Dios está en pacto con Israel. En ese entonces cuando primero fueron ratificados los pactos, era típico de la invocación de testigos. Del mismo modo, vemos aquí a Dios llamando a testigos y su testimonio. Específicamente, Dios está trayendo todo esto contra Israel por las formas en que han violado el pacto que tienen con Él.

Así, este llamado a testigos y testimonios comienza en el versículo 9. Allí, Dios llama a Asdod y Egipto para venir y ser testigos. Asdod, recuerdo, fue una de las cinco principales ciudades de los filisteos. Por lo tanto, esta llamada está dirigida a los filisteos y los egipcios. El lenguaje del versículo 9 es una especie de citación a ellos. “Proclamar en los palacios de Asdod y en los palacios de la tierra de Egipto y decir: “ reúnanse en las montañas de Samaria; vea grandes tumultos en su medio y los oprimidos dentro de ella”. Estas dos naciones fueron convocadas a las montañas que rodean a Samaria. Recuerde, Samaria era la capital de Israel en aquel momento. De las montañas, los filisteos y egipcios tendrían una vista de lo que está sucediendo en Israel. Lamentablemente, verían mucho pecado.

Estos dos testigos debieron ser impactados. Ni los egipcios ni los filisteos son conocidos por su rectitud. Estas naciones paganas habían hecho muchos males, especialmente a Israel. ¿Por qué Dios les llama a ser testigos contra ellos? Incluso hay una especie de sugerencia sutil que lo que verían sería destacar lo malo que son ellos. Incluso estos malvados filisteos y egipcios serían horrorizados por el mal de Israel. Seguramente que sería de mucho asco para esos paganos impíos. Sin embargo, Dios los llama a servir como testigos de lo que está cometiendo Israel.
Vemos este tema de los testigos y testimonio otra vez en el versículo 13. Dios dice, “Oye y testifica en contra de la casa de Jacob.” Se podría pensar que Dios está hablando específicamente a Amós allí, pero la llamada a “oír” y “testificar” se pone en plural. En otras palabras, está dirigida a varios destinatarios. No se nos dice a quien específicamente. En contexto podríamos pensar de los egipcios y los filisteos. Seguramente podría incluirlos. Es probable que en este momento tienen una red aún más amplia. A la luz de todo el pueblo que ha observado los pecados, Él invita a todos a venir y hablar contra Israel. Su pecado ha sido visto; ha llegado a ser conocido. Él pide testimonio legal de hablar contra ellos. Dios llama a personas a declarar con Él que Israel está bajo las sanciones divinas del pacto.

Así, con este primer punto, todo esto plantea la pregunta que empecé hoy. ¿Hoy, si los de afuera de la iglesia miraran lo que está sucediendo en la iglesia de Jesucristo ahora, que verían? ¿Si otros testigos de lo que está haciendo la iglesia hoy, verían cosas que les espantarían? ¿Verían cosas que incluso dirían que estaban equivocadas? ¿Verían cosas como el uso de pornografía, incluso entre hombres casados? ¿Adulterio? ¿Haciendo caso omiso de nuestras propias necesidades? ¿Chismes y la maledicencia a nosotros mismos? ¿Mirando a los demás en la iglesia de mala manera a los que no son tan sabios en cuanto a conocimiento doctrinal y comprensión? Podría seguir. ¿Qué cosas los de afuera atestiguarían contra la iglesia hoy? ¿Qué cosas malas verían en nosotros para juzgar? Ciertamente, hay espacio para aplicación aquí, hay espacio para examinarnos a nosotros mismos como la iglesia de Jesucristo.

Volvamos ahora a nuestro segundo punto y mirar lo que el pecado de Israel se destaca aquí. Por esta razón Israel está bajo el juicio que se está describiendo en este pasaje. Así que, mirando aquí vemos dos pecados principales que se destacan. Uno, la opulencia y la riquezas a expensas de otros; es la implicación cuando conectas los puntos aquí. Dos, perversa adoración a Dios. Pensemos en cada uno. Primero, la opulencia y la riqueza a expensas de otros. Voy a intentar conectar los puntos aquí. Por un lado, este pasaje habla de cómo Israel está oprimiendo a su propia gente. El versículo 9 dice que las naciones verán tumultos en su medio, opresión dentro de ella. En otras palabras, verán a Israel oprimiendo a su propio pueblo. Esto se explica más en el verso 10. Ellos “guardan violencia y robo en sus palacios.” Dentro de su propio lugar almacenan estas cosas. El lenguaje de “guardar” es el idioma de una casa de almacén. Es el lenguaje que desea utilizar para describir cómo acumulan riquezas; en que sus palacios son como depósitos de sus tesoros. Pero aquí habla sobre cómo guardan y acumular violencia y robo. Al menos eso significa que están cometiendo esas cosas en medio de ellos. Pero haciendo un paralelo con el lenguaje de almacén puede tener en cuenta la manera de utilizar violencia y robo a otros y luego tener ganancias mal habidas. Por eso la NLT traduce este verso como «sus fortalezas están llenas de riquezas tomadas por robo y violencia». Lamentablemente, vemos aquí también, por qué pecan de esa manera. Verso 10, “Porque no saben cómo hacer lo correcto”. En su depravación insensible, han llegado a hastiarse de su pecado. Se han olvidado de cómo discernir entre el bien y el mal. Están en un estado terrible.

Esta noción de su riquezas acumuladas se ve en este pasaje por unas referencias específicas. En el versículo 12 hay mención de camas y sofás. Eso probablemente sea la representación de una vida de ocio y descanso que han alcanzado por su robo y opresión violenta a los demás. Además, vemos en referencia del versículo 15 al tener múltiples casas grandes; casas de marfil; casas de invierno y verano. Cuando lees sobre eso seguramente tienes para conectar los puntos. En contexto, la razón de que tienen esas mansiones es debido a cómo han afligido a su propio pueblo. Así, esto trata de un pecado mayor que destaca en este pasaje. Esto es traído a través del libro de Amós. Los ricos se estaban volviendo mas ricos en Israel a través de la aflicción hacia los demás.

El segundo pecado que nos dice se destacó aquí fue su perversión en la adoración. Esto se dice simplemente allí en el versículo 14. Habla de cómo Dios castigará a los altares de Betel. El problema aquí es doble. Uno, no debiera haber habido un templo en Betel. El templo del Señor estaba en Jerusalén. Dios había dicho a Israel antes de que llegaran a la Tierra Prometida que Él pondría su nombre en un lugar determinado una vez que llegaran a la Tierra Prometida. Allí, el Arca de la Alianza estaría con el tabernáculo y el altar. Allí los sacerdotes de Aarón ministrarían junto con el resto de los Levitas. Ellos ofrecerían allí los sacrificios y ofrendas que la ley requiere. Y sin embargo el pueblo de Israel ignoró la casa del Señor sustituyéndolo como ellos querían. Ellos pusieron este lugar de culto en Betel y eso no estaba bien.

Además, la gente tenía becerros de oro en Betel y Dan y los utilizaban para adorar a Dios. Sin embargo, el segundo mandamiento era muy claro. Dios no quería ser adorado a través de ídolos. Las naciones paganas alrededor de ellos adoraban a sus dioses falsos de esta manera. Pero Dios había dicho una y otra vez, que no quiere ser adorado así. Sin embargo, la gente persistió en esta idolatría.

Y por lo tanto, esta es una breve encuesta del pecado de Israel a como se describe en este pasaje. Ahora, en nuestro último punto quiero ver el juicio de Dios que amenaza a Israel. Esto comienza en el versículo 11. Dios dice que Israel será rodeado por un enemigo y destruido. Sabemos eventualmente que se trata de los asirios que va a destruir la nación en 722 AC. Ese un hecho histórico y un cumplimiento histórico.

Vemos lo de algunas de la destrucción descrita en ese verso cuando se habla de sus palacios. Esto dice que serán destruidos sus palacios. Este es un punto importante. Hay cuatro referencias a palacios en este pasaje. Vimos anteriormente cómo su pecado incluye la utilización como almacenes para sus cosas mal habidas. El castigo de Dios se ajustará al crimen cuando Él destruya las fortalezas. Además, este fue un tema reiteradamente mencionado cuando Amós dio los oráculos de siete juicios contra las naciones. Para cada una de las siete naciones menciona que Él destruiría sus palacios. Ahora dice lo mismo para Israel. Su destino sería el mismo que todas las naciones bajo el juicio de Dios.

El juicio de Dios contra Israel se describe cuando el versículo 14 habla de la destrucción que tendría lugar en Betel. Estos altares ilegítimos serían destruidos. Otra vez, vemos cómo los castigos de Dios encajan en el crimen. El versículo 14 tiene una nota interesante cuando menciona cómo los cuernos del altar se cortarán y caerán al suelo. Vemos por ejemplo en los primeros capítulos de 1 Reyes que los cuernos del altar pueden ser un lugar donde alguien podría huir por refugio. La idea es que si corres al templo y te agarras a los cuernos del altar esperas que nadie se atrevan a matarte allí. Era una súplica por misericordia. Y así, Dios para hablar de cortar los cuernos del altar de ellos básicamente dice que perderán toda esperanza de refugio o misericordia. Los falsos templos no dan ayuda ni refugio. Curiosamente, esto inicialmente llega a pasar incluso antes de la destrucción de Asiria. 2 Reyes 23 registra el cumplimiento por Josias rey de Juda que destruyó a Betel y su falso altar.

Una última nota sobre el juicio de Dios sobre ellos tiene que ver con el grado de la misma. Vemos esto se describe en el versículo 12. Habla sobre cómo completamente serán destruidos. Esto se logra con una analogía del pastor. Describe cómo si un pastor pierde una oveja por un león, él va a tratar de “rescatar” algunas pruebas de que la oveja fue comida por un león. Incluso si sólo puede rescatar las piernas o simplemente un pedazo de una oreja, él “rescatará” esa cantidad. La razón por qué un pastor iba hacer esto, es demostrar a los dueños de las ovejas que él no robó las ovejas. Éxodo 22:13 en realidad pone esta práctica en la ley. Y por lo tanto, aquí está la analogía. Israel será destruido así por esta nación enemiga que lo que será “rescatado” de su destrucción va a ser lo que el pastor rescata del león. Por supuesto, para usar la palabra “rescate” es algo satírico. Cualquiera que sea el pastor rescatara del león es sólo prueba de su destrucción; obviamente las ovejas no son salvas. Así también con Israel. Ellos saborearan de una destrucción completa; habrá tan poco que quede después.

El versículo 12 incide más cuando habla de lo que podría quedar después de esta destrucción. Menciona la esquina de una cama y un borde de un sofá. Lo que queda son restos de su opulento estilo de vida que refleja su pecado. Piensa en cuando un incendio destruye una casa y el dueño está rebuscando entre las cenizas tratando de encontrar algo que sobrevivió. Por lo tanto, cuando el polvo se borre de la destrucción de Israel, ¿qué sería “rescatados” de los escombros? ¿Biblias y copias de la ley? No. ¿Alfombra de oración? No. Sólo las esquinas de las camas y los lados de los sofás . Cosas que reflejan su exceso en lo que habían puesto en su corazón y esperanza. Esto también debe iluminar en alguna reflexión interna. Si nosotros mismos terminamos de esta manera, ¿qué permanecería detrás como indicio en cómo vivíamos?

Hermanos y hermanas, hay otra vez mucho juicio en este pasaje. ¿Cómo encontrar gracia y misericordia en el pasaje de hoy? ¿Como predicamos a Cristo de esto el día de hoy? Bien, ciertamente, pudo señalar otra vez al final del libro de Amós. Yo podría señalar el capítulo final que termina todo este juicio con esperanza. Esperanza de una restauración en el Mesías que vendría de la línea de David. Seguramente, todavía es la esperanza del Evangelio más explícita en el libro de Amós. Y esto definitivamente se aplica a este pasaje.

Sin embargo, ¿hay algo que podemos señalar aquí? ¿Hay alguna esperanza de gracia, de misericordia y Cristo que podamos encontrar aquí? En respuesta, yo diría esto. Aquí levanto a mi Ebenezer. Pastor, ¿de qué estas hablando? Aquí planteo mi Ebenezer. ¿Te olvidas lo que fue Ebenezer? Ojalá no olvides porque Ebenezer no es algo que debemos olvidar. Ebenezer fue un monumento memorial de piedra que Samuel puso en 1 Samuel 7:12 el nombre de “Ebenezer” y que significa “piedra de ayuda”. Samuel puso ese monumento memorial de piedra después de que Israel nuevamente había caído en pecado y había sido afligido por los filisteos. En ese pecado, incluso perdieron el Arca durante un tiempo en Asdod. Pero luego se dieron cuenta de que lo tenían que hacer era arrepentirse de sus pecados y llamar a Dios por ayuda y misericordia para que los salvaría.

Y digo otra vez, “Aquí levanto a mi Ebenezer”. En medio de este gran juicio de Dios, Él establece un recordatorio, un monumento, de su misericordia. Por la invitación a Asdod y Egipto para ser testigos contra ellos, se convierten también en recordatorios a las personas de la misericordia y la ayuda de Dios. ¡De todas las naciones podría Dios haber convocado! Egipto – la autodescripción de Dios al amado Israel es que Él es el Dios que los sacó de la tierra de Egipto, fuera de la tierra de esclavitud. Cuando Egipto los afligió, Israel clamó a Dios y se convirtió en su ayuda y salvación. Y Asdod. Asdod y los filisteos. El momento de Ebenezer enseñó la lección de que cuando Dios levanta una nación para que les rodeen, deben arrepentirse de sus pecados y pedir a Dios ayuda. Egipto y Asdod inherentemente son símbolos de la misericordia y la liberación de Dios. Y así, mientras que Dios los pone en las cumbres para ser testigos a todos del pecado de Israel, piensa del otro lado de las cosas. Israel podría luego mirar las montañas y ver cómo Dios puso ahí dos piedras como memorial. Podrían ver a Asdod y Egipto en las montañas que los rodean y recordar que Dios es su ayuda. Asdod y Egipto entonces se convierten en un testimonio de cómo Dios es ayuda y salvación de Israel. Ellos podían, debían, recordar que aún tenían tiempo para arrepentirse de sus pecados y volver al Señor. El Señor es su ayuda. Esta es una lección que no deben olvidar. Y Dios ha dado una gran ayuda a su pueblo últimamente, enviando a su Jesús. Jesús es quien hizo el camino para su pueblo para ser perdonados de sus muchos pecados y ofensas.

De la misma manera, cuando Dios utiliza la analogía de un pastor que apenas es capaz de rescatar algunas piezas de una oveja, ¿qué debe venir a sus mentes? ¿Qué debe Israel pensar al oír de tal pastor? Deben recordar que el Señor es su pastor. Un buen pastor. No un pastor que sólo puede rescatar un pedazo de una oreja. No, un pastor que es capaz de guardarlos completamente y rescatarlos. Y sabemos cómo Él lo ha hecho. En la plenitud de los tiempos, Dios envió a su Hijo para ser un buen Pastor. El buen Pastor que puso su vida por sus ovejas. Para aclarar, el buen Pastor salva sus ovejas. De lo contrario Él sólo sería un pastor bien intencionado. Por Hebreos 13:20, Jesús es el gran Pastor de las ovejas, que a través de la sangre del pacto eterno, nos hará completos en cada buena obra para hacer su voluntad.

Y por lo tanto, Jesucristo es Señor de ayuda para nosotros. Y Jesús es este buen Pastor que nos salva de nuestros pecados y sus consecuencias. Él nos pastoreará y ayudará a lo largo de esta vida. Él hará esto hasta que nos lleve a las mansiones que ha preparado para nosotros su pueblo para la eternidad. Mansiones no obtenidas por violencia u opresión, sino por la rica gracia de Dios.

Aquí yo levanto a mi Ebenezer. Vea los recordatorios sutiles de Dios en este texto de su ayuda y su gracia. Recordemos hoy otra vez la obra salvadora de Dios en su hijo Jesús. Donde tenemos hoy que examinarnos a nosotros mismos y ver el pecado de que tenemos que arrepentirnos, hagámoslo. Arrepintámonos y clamar a Dios por ayuda renovada y perdón.

Y entonces, debemos también prestar atención a cómo vivimos. Vivamos entonces ante un mundo que nos está viendo así como recordamos de la salvación de Dios en Cristo. Invitemos al mundo a ver lo que es vivir como un discípulo de Cristo. No una vida de perfección, pero una vida de fe diaria y arrepentimiento. El mundo nos está mirando. Por la gracia de Dios puedan ver vidas siendo transformadas por Cristo. Que nuestras vidas y nuestras confesiones sean testigo y testimonio a ellos, del Evangelio. Que ellos puedan ver cómo es la vida bajo el nuevo pacto y desear unirse con nosotros en la ciudad santa de Cristo su iglesia. Amén.

Copyright © 2017 Reverendo W. Reid Hankins, M. Div.
Todos los derechos reservados.