La Fiesta de los Tabernáculos para el SEÑ0R

Sermón predicado en Levítico 23:33-44 por el Reverendo W. Reid Hankins durante el servicio de adoración en la Iglesia Presbiteriana de la Trinidad en 23/11/20 en Novato, CA.

Sermón

Reverendo W. Reid Hankins, M.Div.
Traducido por el Diácono Diego Merino

En nuestra noche de acción de gracias y dedicación este último viernes, tuvimos la oportunidad de considerar las tres fiestas principales de Israel en relación con el templo del antiguo pacto y en aplicación a nuestro edificio. Hoy, quería que siguiéramos pensando en las fiestas, pero particularmente en la Fiesta de las Cabañas, que también se conoce como la Fiesta de los Tabernáculos, y en el hebreo, Sucot. La Torá enumera instrucciones para la Fiesta de los Tabernáculos aquí y también en Éxodo 23, Números 29 y Deuteronomio 16. El hecho de que esta y las otras fiestas se mencionen en muchos lugares nos recuerda su importancia bajo el antiguo pacto. Y aunque estos ya no son días santos para observar bajo el nuevo pacto, continúan encarnando enseñanzas ricas y significativas para que aprendamos y hagamos aplicaciones hoy. Hoy, entonces, pensaremos en la Fiesta de las Cabañas como un sermón de acción de gracias a la luz de las próximas fiestas de Acción de Gracias de nuestra nación.

Para nuestro primer punto de hoy, me gustaría llamar su atención sobre los versículos 33-36. Allí aprendemos que la Fiesta de las Cabañas iba a ocurrir el día quince del séptimo mes. Para aclarar, este séptimo mes no se refiere a julio. Israel usó un calendario diferente al que tenemos hoy, no solo con diferentes nombres de los meses, sino que su calendario era un calendario lunar, mientras que nuestro calendario de hoy en los Estados Unidos es un calendario solar. Muchas culturas han utilizado calendarios lunares, es decir, sus meses están ligados a los ciclos lunares, de modo que cada mes equivale a un ciclo lleno de una luna nueva a una luna llena. Esto contrasta con un calendario solar que ordena su año alrededor del tiempo que tarda la Tierra en orbitar alrededor del sol. Ninguno de los calendarios es perfecto, ni para rastrear el sol o la luna, ni cuando se trata de hacer coincidir con nuestras cuatro estaciones de primavera, verano, otoño e invierno. Nuestros calendarios solares tienen que ser corregidos cada cuatro años añadiendo un día extra. Y los calendarios lunares agregan un mes entero en sus años bisiestos (que ocurren aproximadamente cada 3 años más o menos). Entonces, eso significa que este séptimo mes enumerado en el versículo 34 es el mes judío de Tishrei que típicamente cae en septiembre u octubre de nuestro calendario. Por ejemplo, este año el 15 de Tishrei fue el 9 de octubre.

Quería hablar sobre dónde cae esto en el calendario para que entendamos que esta Fiesta de los Tabernáculos cae al final de la temporada de cosecha. Esta fue una parte clave del significado de esta fiesta. De hecho, cuando esta misma fiesta se describe en Éxodo 23, en realidad se llama allí la Fiesta de la Recolección; la palabra recolección describe la cosecha de cultivos. Entonces, aunque hablaremos en un momento sobre por qué esta fiesta se llamaba la Fiesta de las Cabañas, primero quería que apreciáramos por qué también se llama la Fiesta de la Recolección. Dios hizo establecer esta fiesta en la época del año en que la cosecha está llegando a su fin. Hay un significado agrícola como parte clave de esta fiesta. Dios quería que su pueblo tomara tiempo al final de la cosecha y celebrara la abundante provisión de alimentos de Dios y le agradecieran por ello. En otras palabras, esta Fiesta de las Cabañas cae alrededor de esta misma época del año cuando nosotros en nuestro país estamos celebrando estas mismas cosas. Por lo general, hacia finales de septiembre comenzamos a ver calabazas apareciendo y en octubre vemos varios festivales de la cosecha que comienzan a suceder y luego en noviembre culmina con nuestras fiestas nacionales de Acción de Gracias. Si tuviéramos que elegir un festival religioso en la historia de Israel que se alinee más estrechamente con lo que celebramos como nación durante el Día de Acción de Gracias, sin duda sería la Fiesta de las Cabañas sin lugar a dudas.

Mi aplicación entonces en este primer punto es decir que es muy apropiado para nosotros agradecer anualmente a Dios durante esta época del año por toda la generosidad de la cosecha que nos ha dado. Mientras que bajo el nuevo pacto Dios no ha instituido explícitamente un festival religioso para ello, ciertamente tenemos suficiente enseñanza sobre esto de las Escrituras para saber que deberíamos estar mencionando un punto para agradecer a Dios por una provisión tan rica y abundante. Nuestra nación ha establecido durante muchos años un día de Acción de Gracias como feriado nacional, y de hecho deberíamos estar ansiosos por someternos a ese llamado. Pero incluso si nuestro país no tuviera ese día festivo, deberíamos, como jefes de familia e incluso la iglesia, reconocer y agradecer a Dios por tal provisión de nuestros alimentos. Piénsalo de esta manera: cada semana como iglesia oramos: “Danos hoy nuestro pan de cada día”. De hecho, debemos asegurarnos de agradecer a Dios mientras responde a esa oración. Así que ese es mi primer punto y mi primera aplicación, el momento y la naturaleza de esta Fiesta de Cabañas / Recolección nos da una aplicación extendida para agradecer a Dios en esta época del año por la cosecha agrícola.

Volvamos ahora a los versículos 37-38. Esta es una ubicación interesante de estos versículos porque resumen todas las fiestas anuales que se han esbozado en todo este capítulo 23 de Levítico. Solo leemos la parte del capítulo sobre la Fiesta de las Cabañas, pero el resto del capítulo enumera la otra. Para aclarar, no es sorprendente tener un resumen al final del capítulo. Y, sin embargo, después de este resumen final, hay un regreso en el versículo 39 para hablar más sobre la Fiesta de las Cabañas. Pero por ahora, notemos que estos versículos resumen todas las fiestas entre Israel.

En el servicio del viernes por la noche mencioné las tres grandes fiestas bajo el antiguo pacto judío, a saber, la Pascua, la Fiesta de las Semanas y la Fiesta de las Cabañas. Este capítulo nos recuerda que también hubo varias otras fiestas. El capítulo comienza mencionando los sabbaths semanales, pero luego enumera las otras fiestas regulares en el calendario. Lo que ocurrieron en la primavera fueron la Pascua, luego la Fiesta de los Panes sin Levadura, luego la Fiesta de las Primicias y luego la Fiesta de las Semanas. Luego tienes los festivales de otoño que comienzan con la Fiesta de las Trompetas y luego el Día de la Expiación, y finalmente esta Fiesta de las Cabañas. Entonces, estos abarcan todo el año, y como mencioné el viernes, el orden es significativo. El orden es significativo con respecto al calendario agrícola. También es significativo en cómo el orden de las fiestas muestra una imagen de la historia redentora, con la historia de Israel en el Éxodo y luego entrando en la Tierra Prometida siendo tipológico a nuestra redención del pecado y nuestra recompensa eterna en la era venidera.

Así que note que el versículo 37 resume todas estas fiestas señaladas como tiempos de santas convocaciones. Permítanme asegurarme de que entiendan lo que eso está diciendo. Estas convocatorias están hablando de asambleas para el culto corporativo. En estas fiestas especiales debían tener servicios especiales donde se reunían para adorar. Estas no eran fiestas seculares. Eran santas y religiosas. Al igual que cuando celebramos la fiesta que se nos ha dado bajo el nuevo pacto, la Cena del Señor, es una fiesta santa y celebramos en un contexto de adoración.

Entonces, note qué más tiene que decir sobre las convocatorias santas. Dice que se convierten en la ocasión para la presentación de ofrendas al SEÑOR. En el versículo 37, dice que estas convocatorias deben ser, “para presentar al SEÑOR ofrendas de comida, holocaustos y ofrendas de grano, ofrendas de sacrificio y bebida, cada una en su día apropiado. Eso es para notar que en las descripciones de cada una de estas fiestas, Dios enumera ciertos tipos de ofrendas para que la gente traiga como parte de su adoración relacionada con la fiesta. En el caso de la Fiesta de las Cabañas vemos en el versículo 36 que ordena que se traigan ofrendas de comida. Esa descripción, sin embargo, es una versión concisa de las instrucciones completas que se pueden encontrar en Números 29. Allí, una larga lista diaria de varios tipos específicos de ofrendas se enumera para la Fiesta de las Cabañas. Entonces, el versículo 37 señala que no solo estas fiestas deben ser ocasiones para la adoración religiosa, sino que tal adoración también debe incluir al pueblo de Dios trayendo sus ofrendas ante el Señor.

El versículo 38 continúa explicando y aclarando que estos son adicionales a las ofrendas regulares normales que uno podría traer. La gente traía sus ofrendas semanales en los sábados. Tendrían otras ocasiones para la ofrenda especial de votos y las ofrendas voluntarias de vez en cuando. Pero estas ofrendas para las fiestas debían ser adicionales a eso y conectadas con el significado de la fiesta individual. A medida que estas diferentes fiestas conmemoran tanto los actos históricos de redención de Dios para su pueblo como su provisión continua para ellos, Dios dijo que las personas deben responder con gratitud a través de la entrega de ofrendas como un acto de adoración.

Hagamos alguna aplicación entonces aquí. Nos gustaría notar que, en general, el sistema de sacrificios se ha cumplido en Cristo Jesús. Es por eso que ya no sacrificamos animales como parte de nuestro culto religioso. La muerte de Jesús en la cruz fue el sacrificio de una vez por todas que puso fin a todos los sacrificios por el pueblo de Dios. Y sin embargo, aunque eso es cierto, y que bajo el nuevo pacto no tenemos la misma amplia gama de sacrificios y ofrendas que ellos hicieron entonces, eso no significa que no haya ninguna aplicación más allá de señalar a Cristo. De hecho, el Nuevo Testamento menciona otras aplicaciones. Como la forma en que Romanos 12: 1 nos llama en respuesta a lo que Dios ha hecho por nosotros en Cristo para ofrecer todo nuestro ser como un sacrificio vivo en servicio a Jesús. Y también como la forma en que el apóstol Pablo describe el apoyo financiero que la iglesia en Filipos le dio como una “ofrenda fragante, un sacrificio agradable a Dios (Filipenses 4:18). Pasajes como este muestran que aunque Jesús finalmente cumplió el sistema de sacrificios, todavía hay una aplicación cordial que hacer de Él hacia nuestra propia entrega a Dios tanto de nuestras riquezas como de nuestro tiempo y talentos.

Entonces, vamos más adelante con esa aplicación. Si, en general, los sacrificios y las ofrendas del antiguo pacto dan aplicación a nuestra propia ofrenda financiera al Señor, entonces seguramente el pasaje de hoy nos enseña que hay un tiempo y un lugar para nuestras ofrendas regulares y generales, pero también para nuestras ofrendas especiales ocasionales. Como ejemplo, ha sido una práctica histórica larga que cuando los cristianos celebran la fiesta de la Cena del Señor, toman una colecta para los pobres en medio de ellos; hacemos lo mismo alentándolos en esos domingos a considerar hacer una ofrenda adicional al fondo diaconal. Y en una línea similar de aplicación, hemos llegado nuevamente este año a nuestra Ofrenda denominacional anual de Acción de Gracias. Ahora, hasta el final del año, estaremos recolectando esta ofrenda. Seguramente la idea de la Ofrenda de Gracias es una aplicación adecuada derivada del pasaje de hoy. Que durante esta época del año cuando damos gracias a Dios por la cosecha y su generosidad para nosotros, que venimos para traer ofrendas especiales a Dios. La Ofrenda de Gracias es una manera maravillosa de hacer esto, y es una manera en que todos podemos involucrarnos personalmente en asociarnos para llevar el evangelio a los confines de la tierra.

Pasemos ahora a nuestro tercer punto considerando los versículos 39-44. Aquí el pasaje regresa a la Fiesta de las Cabañas. Por qué regresa aquí después de lo que parecía un resumen final de todas las fiestas es incierto. Puede ser el contraste con los sabbaths semanales que comenzaron el capítulo y se establecieron antes de una lista de todas las fiestas especiales durante todo el año. Los sabbaths debido a su naturaleza semanal regular se destacan de manera diferente a las fiestas ocasionales especiales durante todo el año. Así también, tal vez como la última fiesta, la Fiesta de las Cabañas tiene un lugar especial, ya que mira más allá de todo esto hasta la eternidad. Ese fue el punto que mencioné el viernes, que la Fiesta de las Cabañas miraba en última instancia al lugar de descanso y paz al que Dios nos traerá en la gloria de la era venidera. Pero eso es ir hacia adelante. Veamos lo que dice el texto aquí.

Así que en estos versículos finales, vemos que Dios quería que la Fiesta de las Cabañas no solo fuera sobre la recolección de la cosecha, sino también como un memorial de cómo Dios los había hecho morar en cabañas cuando los sacó de la tierra de Egipto. Por cierto, si no sabes qué es una cabaña, es una estructura de vida temporal. Es por eso que esto también se llama la Fiesta de los Tabernáculos, ya que un tabernáculo es una estructura de tienda como una forma de vivienda temporal.

Entonces, el mandato aquí es que durante la semana de la Fiesta de las Cabañas la gente debe hacer estas estructuras temporales de ramas de árboles. Deben permanecer en estas casas temporales durante una semana cada año. Pero date cuenta de que están haciendo eso cuando en realidad tienen hogares reales ahora. Están celebrando esta fiesta desde la comodidad de su propia tierra que Dios los ha establecido. Mencioné este punto el viernes y lo vuelvo a hacer. Mientras que la Fiesta de las Cabañas en la superficie es para recordarle a la gente que Dios los hizo vivir en tiendas, al mismo tiempo es para recordarles que ya no viven mas en tiendas de campaña. La Fiesta de las Cabañas les recuerda su tiempo en los cuarenta años de vagar por el desierto para recordarles que ya no vagan mas por el desierto. La Fiesta de las Cabañas les recuerda ese tiempo cuando eran extranjeros para recordarles que ya no son extranjeros. Se ha sugerido que incluso las instrucciones en el versículo 40 con esta variedad de árboles bonitos para obtener ramas es un recordatorio de cómo Dios ahora los ha establecido en la tierra, una tierra llena de hermosos árboles frutales y bonitas palmeras y abundantes sauces, etc. Mientras vagaban por el desierto, seguramente no siempre tenían la misma variedad amplia y rica de árboles para mostrar. Pero ya ves, esa es la doble función de esta fiesta. Les recuerda por lo que habían pasado, pero también a dónde habían llegado. Ahora habían regresado a casa, se habían establecido, habían llegado a la Tierra Prometida que Dios les había dado como herencia. Entonces, desde un punto de vista tipológico en la línea de tiempo de la historia redentora, como el final del calendario de fiestas, la Fiesta de las Cabañas representa para nosotros nuestra llegada final a la gloria cuando Cristo regrese.

Note que en el versículo 42 Dios enfatiza cómo había hecho que la gente habitara en cabañas durante esos cuarenta años de vagar por el desierto después del Éxodo. Ese momento difícil fue de acuerdo con el plan de Dios. ¿Cuáles fueron los propósitos de Dios para su pueblo durante ese vagabundeo por el desierto? Señalaré algunas cosas. Uno, fue un tiempo de castigo para ellos. Usted puede recordar que presumiblemente no habrían estado tanto tiempo en el desierto si hubieran confiado en Dios. Cuando se acercaron por primera vez a la Tierra Prometida, se asustaron de los gigantes que poseían la tierra, y murmuraron contra Dios y Dios los envió de regreso al desierto para vagar durante cuarenta años. Dios dijo que eso permitiría que la próxima generación creciera y aprendiera a confiar en Dios y luego los traería a la tierra. Así que ese es un segundo propósito de Dios en ese momento, Él estaba preparando a la gente para confiar en Él. Es por eso que durante el tiempo que estuvieron errando por el desierto, Dios les dio maná del cielo, porque dijo que quería enseñarles que no necesitaban solo comida para vivir, sino que necesitaban especialmente la Palabra de Dios para vivir. Del mismo modo, vemos en Deuteronomio 29: 5 que durante esos cuarenta años de errar por el desierto, Dios milagrosamente preservó sus ropas y sus zapatos para que pudieran pasar esa temporada. Ese es quizás el mayor propósito de Dios en esto, enseñar a la gente que Dios cumple sus promesas y podemos confiar en Él, porque Él es fiel a su Palabra, al final de los cuarenta años, los trajo poderosamente a la Tierra Prometida para poseerla.

Entonces, esta fiesta les recordó su estadía pasada y cómo Dios finalmente los había traído a la tierra. En términos de aplicación hoy, somos extranjeros espiritualmente hablando que aún no estamos en nuestros hogares finales. Nuestra era es un nuevo tipo de tiempo errante en el desierto para nosotros. Pedro nos llama extranjeros en 1 Pedro 2:11 y seguramente este es el punto que está mencionado allí. Como cristianos, nuestro hogar final es la gloria en la era venidera. Pero no podremos entrar allí y establecernos allí hasta que Cristo regrese. Hasta entonces, vivimos en pero no somos de este mundo. Hasta entonces, enfrentaremos varios problemas y pruebas. Pero si la Fiesta de las Cabañas pudo recordarle a Israel que Dios finalmente los trajo a casa, nos predica hoy que Dios finalmente nos traerá a casa. Dios los hizo vivir en cabañas como extranjeros. Él nos está haciendo vivir temporalmente como extranjeros espirituales. Pero los propósitos de Dios son buenos y continúan obrando en nuestras vidas. Así como Dios proveyó para Israel cuando erraban por el desierto, así proveerá para nosotros durante el tiempo de errar por el desierto.

Entonces, mientras disfrutamos de nuestro feriado nacional de Acción de Gracias esta semana, es natural pensar en las muchas bendiciones en este mundo y cuán bien establecido y lleno de paz y bendición aquí y ahora puede ser tu vida. Dije en nuestro primer punto incluso que deberíamos agradecer a Dios por ello. Pero que también se nos recuerde cómo, en última instancia, este no es nuestro hogar final, y que también debemos mantener esta perspectiva de que somos extranjeros en el camino a la gloria. Que podamos mantener ambas verdades en la perspectiva apropiada y así en todas las cosas dar gracias a Dios nuevamente este día.

Amén.

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